domingo, 11 de enero de 2009

Al contrario que contra Osasuna,se jugó bien y no se supo ganar.


Racing 1-1 Recre


Racing y Recreativo siguen sumando, y un punto no es malo a estas alturas, aunque su valor real se verá a finales de temporada. Los cántabros se adelantaron gracias a un gran gol de Jonathan Soriano, pero, antes del descanso, Camuñas ponía las tablas en el marcador después de otra brillante acción individual. En la segunda parte, aunque a los puntos, el Decano se hizo acreedor a un botín mayor ante un Racing en el que sólo brilló Óscar Serrano (hasta ser extrañamente sustituído) y Nicola Zigic, en su vuelta a casa, pasó inadvertido.En Santander, los optimistas recordarán que el Racing lleva desde el 30 de noviembre sin perder; para los pesimistas, el equipo llevará sin ganar –con la excepción del Manchester City en la UEFA– desde el 23 del mismo mes. Con todo, los cántabros se mantienen en la zona tibia, aunque sus tres últimos partidos en casa se han saldado con idéntico resultado: 1-1. Y ante equipos de 'su' liga, lo que provoca que la gente ande algo inquieta. Se evidenció ante el Recreativo, y con razón, porque los onubenses se plantaron con descaro en El Sardinero y pudieron incluso ganar el partido. A los puntos lo hubieran merecido, pero esto no es boxeo. El Decano de Lucas Alcaraz se sobrepuso incluso al gran gol de Jonathan Pereira, un prodigio de calidad del menudo punta gallego: recibió un buen balón de Óscar Serrano, se coló como una lagartija entre los dos centrales y picó sobrado de calidad ante la salida de Riesgo. El tanto llegó sobre la media hora y desniveló un partido más igualado de lo que entonces decía el marcador. El Racing quiso empezar mandando, pero el Recre despertó tras un latigazo de Camuñas que asustó bastante a Toño. Con el 1-0, el Decano dio un paso al frente y Camuñas volvió a avisar. A la tercera fue la vencida, y el madrileño dejó otra pequeña obra de arte: robo a Luccin, dribling facilísimo sobre Garay, caño al francés –que bajó en la ayuda para enmendar la pifia anterior– y definición elegante del medio onubense, con un disparo colocado al primer palo.
De Serrano a CamuñasTras el paso por vestuarios (en los que se quedó Garay, horrible), el Racing se encomendó a Óscar Serrano, que se trasmutó en martillo pilón. El catalán percutió una y otra vez por banda izquierda, desquiciando a Morris y obligando incluso a Camuñas (el mejor del partido) a olvidarse del ataque y echar una mano atrás. Sorprendentemente (a no ser a causa de problemas físicos que no han trascendido), Muñiz lo sacó del campo al cuarto de hora. Y ahí se acabó el Racing, que no encontró a Zigic y apenas dejó un par de detalles del eterno Munitis.Obviamente, Camuñas intervino en las dos acciones con las que los andaluces pudieron llevarse el partido. En la primera, puso un balón perfecto al segundo palo que Barber empaló fuera. Y, ya en el minuto 80, habilitó a Adrián Colunga, cuyo disparo sacó Toño, como también el segundo intento, a cargo de Akalé. Quizá el Recre debió lanzarse con más arrojo a por el partido, pero al final contemporizó. Al fin y al cabo, un punto es punto. Y ya son 10 sobre los 15 últimos, que no está nada mal...


Fuente: Marca